Periquita tinto 1977

Periquita cuenta con ese lejano prestigio de ser el primer vino embotellado en Portugal, allá por el lejano 1850. Hablar de la historia de José Maria da Fonseca es meterse en las entrañas de un icono portugués. Todavía se pueden degustar fabulosos tintos de Periquita de los años 60 que no pestañean ante la proximidad del sacacorchos, y conviven ufanos con los jovencísimos Periquita del año pasado. "No son iguales", nos dirá alguno... Obviamente no, pero la firma ha sabido aprovechar su fama y escalonar sus variadísimos vinos en key wines, premium wines y super premium wines, y es ahí donde encontramos a Periquita Superyor, encaramado en la cima y buscando en el horizonte los recuerdos de sus ancestros.




José Maria da Fonseca Periquita tinto 1977. 
Tipo: tinto seco.
Procedencia: Portugal > Azeitão.
Web: José Maria da Fonseca
Precio: 30 EUR
Proveedor: Garrafeira Nacional.
Maridajes: muy versátil, tiene empaque para soportar platos muy contundentes, y finura y elegancia para ponerse sofisticado.
Puntuación media (2): 4.50 / 5.
Fecha de cata: febrero 2017.

Seduce a la vista un vino granate de capa media baja, todavía no muy abierto, a pesar de la edad, y con una lágrima muy gruesa y abundante. En nariz es complejo y exquisito, muy satisfactorio, como se le espera, con una mezcla casi imposible de matices: tomillo, fruta seca, ñora, tomate seco, cálido, hondo, cambiante, un cierto bálsamo fino, mueble viejo, suave barniz, tierra húmeda... un vaivén de sensaciones. Al trago viene más complejo si cabe, con una buenísima acidez, con finura, franco todo lo que puede ser, y cálido, persistente, con un tanino aún vivo, pero muy redondo, aterciopelado, suave, intenso, especiado, con inolvidables recuerdos de caramelo de café y mermelada agridulce. Un vino increíble y con larga vida por delante.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.

Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Heretat de Taverners Punt Dolç embotellado en 2015 (reseña)

Heretat de Taverners Punt Dolç embotellado en 2015. 
Tipo: tinto dulce natural.
Winemaker: Nacho Montés.
Procedencia: España > Valencia > Fontanars dels Alforins.
Coupage: monastrell y garnacha tintorera.
Elaboración: dulce natural con el sistema de criaderas en barricas de roble y sacas en años alternos.
Producción: 2000 botellas de 0.5L en años alternos.
Web: Heretat de Taverners
Precio: 13 EUR
Proveedor: Heretat de Taverners.
Maridajes: delicado, foie a la plancha, postres de chocolate, frutos secos, y para los más atrevidos un solomillo de ternera al foie.
Puntuación media (6): 4.42 / 5.
Fecha de cata: febrero 2017.

Vino tinto dulce de color sangre, de capa alta y lágrima espectacular: hermosísimo. En nariz es muy complejo, despliega una paleta de aromas amplia y colorida: tabaco, cuero, fruta roja muy madura, crema, barniz, pasa, grasa de zapatos... tiene mucha clase, mucha elegancia, mucha profundidad, y es muy original, no se acaba. En boca es fresco, redondo, carnoso, jugoso, ligero y voluminoso a la vez, con mucho cuerpo y con un tanino dulce y contundente muy bien domado, que remata en un final largo, persistente y firme. Un vino fuera de serie, que no tiene parangón en su clase, uno de los dulces más singulares que se elaboran en España, y que no tiene rival en precio.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.

Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Maestro Tejero A dos tiempos 2011 (reseña)

Maestro Tejero A dos tiempos 2011. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Alfredo Maestro.
Procedencia: España > Madrid > Navalcarnero.
Coupage: garnacha 50% y tempranillo 50%.
Elaboración: vinificación de las variedades por separdo, natural y manual; fermentación con levaduras autóctonas; 5 meses de crianza en barrica de roble francés de segundo año.
Producción: 5000 botellas.
Web: Maestro Tejero
Precio: 8-10 EUR
Proveedor: Vinistas.
Maridajes: versátil en platos a base de carne.
Puntuación media (4): 3.75 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de color cereza oscuro de capa media alta, que descubre una nariz intensa, perfumada, con buena carga frutal predominante, matizada y sofisticada por notas de cuero, especias dulces, bálsamo y sutiles matices terciarios propios de su evolución. En el paladar es franco, con preheminencia de una fruta de zarza negra y madura de muy buena calidad; se desarrolla voluminoso, cálido, amable y con un tanino aterciopelado, dulce, tranquilo, y remata con un final sápido, persistente, intenso, carnoso y colorido. Un vino maduro, generoso y equilibrado, para beber ya, aunque aguantará bien dos o tres años más.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.

Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Horizontal de Vinos de la Cruz

Llamamos la atención sobre esta joven bodega de un joven viticultor de esos que no tienen prejuicios en elaborar vino con amor, sin mirar tanto el comercio como el buen hacer. Probamos tres de los vinos que tiene actualmente en el mercado, el Mapa de Lunares, un tinto con madera, el Laureus, un tinto de maceración carbónica, y el Crux, un blanco sin madera de viñas viejas de airén. Todos de calidad notable y a un precio insuperable. El viticultor merece un aplauso y no menos que una reseña en este blog.

Vinos de la Cruz Mapa de Lunares 2015. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Juan Miguel de la Cruz Gento.
Procedencia: España > La Mancha > Villarrobledo.
Coupage: diversas variedades.
Elaboración: tradicional, sin filtrar, con madera.
Producción: 1500 botellas.
Precio: 3-5 EUR
Proveedor: Vinos de la Cruz.
Maridajes: es bastante versátil, guisos contundentes, platos especiados, platos a base de carne, pastas, arroces y legumbres, carnes en salsa.
Puntuación media (2): 3.25 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Botella nº 597 de un vino de color granate hacia púrpura, de capa media alta, intenso, profundo, con el ribete prieto y rosado y una buena lágrima. Se nos presenta un vino de pueblo, de los de hacer con las manos, con fruta, madera y especias bien integradas, de intensidad media, con notas lejanas y juveniles de monte. Al paladar es fresco, dulce, ligero, de buen volumen, franco, de tanino muy redondeado, buena acidez y final persistente. Integra fruta, especias y un final de regaliz con recuerdos de yerbas aromáticas y una pizca de pimienta rosa. Tiene estructura para 10 años.


Vinos de la Cruz Laureus Maceración Carbónica 2016. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Juan Miguel de la Cruz Gento.
Procedencia: España > La Mancha > Villarrobledo.
Coupage: cencibel (tempranillo).
Elaboración: tradicional, maceración carbónica, sin filtrar.
Precio: 3-5 EUR
Proveedor: Vinos de la Cruz.
Maridajes: es bastante versátil en la gama de platos no muy contundentes, principalmente con base de arroz, legumbres o pasta.
Puntuación media (2): 3.00 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de parcela, de color cereza de capa media, vivo y junvenil. Tiene las características propias de los jóvenes de maceración carbónica, su frescura, dulzor, frutosidad, su carácter de infante y chuchería, su jovialidad desenfadada... Pero en este caso encontramos también un vino equilibrado, de acidez contenida, de beber muy amable, con ese fondo de regaliz que pincela los vinos de la bodega, y sin ese principio de efervescencia que caracteriza a los vulgares vinos de esta clase. El precio, eso sí, es como el de los más baratos.

Vinos de la Cruz Crux 2016. 
Tipo: blanco seco.
Winemaker: Juan Miguel de la Cruz Gento.
Procedencia: España > La Mancha > Villarrobledo.
Coupage: airén de viñas de 64 años de edad, de pie franco, en vaso y sin injertar.
Elaboración: tradicional, sin filtrar, sin madera.
Precio: 3-5 EUR
Proveedor: Vinos de la Cruz.
Maridajes: es bastante versátil, preferentemente en platos a base de verduras y pescados.
Puntuación media (3): 3.13 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de parcela, de color amarillo pajizo pálido y limpio. Destaca su equilibrio y su carácter de terruño y de hacedor, quizá por eso de ser un viñedo viejo y estar cultivado con mimo. Las notas de fruta blanca, la redondez, la armonía de la acidez con los sutiles matices minerales, el paso redondo, voluminoso, amable, templado, nos hacen pensar en un vino de otra fama. Es un vino personal y muy original, que no encuentra rival a ese precio.

En conclusión, podemos afirmar que los vinos de Juan Miguel de la Cruz son exclusivos, personales, con carácter, de escasa producción, genuinos, de buena calidad y baratísimos.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.

Entre paréntesis el número de puntuaciones.

La Rioja Alta Club de Cosecheros 1982

Tenemos la suerte hoy de disfrutar de uno de los vinos raros por antonomasia, de esos que nunca salen al mercado y que se elaboran para clientes particulares y se descubren en bodegas privadas. Hablamos de uno de los vinos del Club de Cosecheros de la bodega La Rioja Alta, emblemática por sus famosísimos y mundialmente reconocidos 890, 904, Ardanza, Arana y Alberdi. El Club se creó en 1976 con el espíritu de que el socio pudiera tener un vino elaborado por la bodega desde el momento de su cosecha, una barrica entera (240 botellas), única y exclusiva. El vino que de allí sale se embotella y se etiqueta para el socio. Hoy en día el club mantiene el rumbo. Probamos una de sus primeras añadas, la mítica cosecha riojana de 1982, que tantas luces ha dado.


La Rioja Alta Club de Cosecheros 1982. 
Tipo: tinto seco.
Procedencia: España > Rioja > Haro.
Coupage: tempranillo (mayoritaria), graciano, viura.
Elaboración: 12 meses de crianza en tinos de roble y 1 o 2 años en barrica de roble.
Producción: 5 botellas.
Web: La Rioja Alta
Precio: 30 EUR
Puntuación media (1): 4.00 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino marrón nebuloso, de capa media y ribete anaranjado que denota evolución, con una lágrima muy gruesa. Al primer soplo se muestra con buena intensidad, nada roto, con fuerza, con predominio de detalles terciarios propios de la edad: barniz, mueble viejo, fruta roja en mermelada, almizcle, jarabe de algarroba... Pero con la oxigenación viene más fresco y frutal, con un buen soplo de acidez y una complejidad relevante. En el paladar se desenvuelve fresco, seco, con una fuerte punzada de acidez y gran presencia de madera, con un tanino viejo, muy domado, pero aún vigoroso, con potencia en general y con un carácter longitudinal. Tiene un recuerdo frutal más fresco que en nariz, seco, quizá de guindas al marrasquino. El conjunto tiene buen cuerpo y estructura, y también acidez para soportar algunos años más; no obstante, su mejor momento ya pasó, y cuanto antes se beba mejor.


Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.

Entre paréntesis el número de puntuaciones.

CVNE 5º Año 1978

Nos detenemos un momento ante la Compañía Vinícola del Norte de España, más conocida por sus siglas CVNE, o incluso como Cuné. Se trata de una de esas bodegas centenarias del barrio de la estación, en Haro, que durante décadas han dado lustre y esplendor al nombre de Rioja. Hoy en día, la firma engloba cuatro marcas, Contino, Imperial, Viña Real y la propia CVNE, siendo esta quizá la más comercial del grupo, que elabora 11 tipos de vino diferentes, con la clara vocación de agradar a todo el mundo. Sin embargo, en los años 70, sus vinos eran otra cosa, comerciales sí, pero desde una perspectiva bien distinta. Vamos a prestarle atención a su vino de 5º año, que ya no puede compararse con nada de lo que hacen en la actualidad, ni siquiera con el gran reserva. El tempo lo ha colocado en la cima, y en la nostalgia.

CVNE 5º Año 1978. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Nombre.
Procedencia: España > Rioja > Haro.
Coupage: tempranillo.
Elaboración: embotellado en su 5º año de crianza.
Web: CVNE
Precio: 50 EUR
Proveedor: Vinovintage Santander.
Maridajes: un beso.
Puntuación media (2): 5.00 / 5.
Fecha de cata: noviembre 2016.

Detrás de un corcho frágil, que se negaba a salir de la botella y descubrir, celoso, el preciado elixir, encontramos un vino marrón cobrizo, como el brandy, con el ribete muy abierto, ocre claro, de una gama tonal amplia, con buena intensidad de color, limpio, brillante, de media capa y lágrima lenta y gruesa. Precioso.

En aromas era fino, largo, elegante, profundo y muy complejo. Al primer golpe mostraba predominio de la uva pasa, del pan de higo con frutos secos de piel, pero después dejaba entrever un corazón de fruta roja reducida con buena viveza y enorme complejidad, con retazos de tabaco de pipa, de cuero, de sutil licor de naranja onuvense, de ligeros ahumados, de turrón de guirlache... Excepcional.

En su ataque se demostró fresco, limpio y redondo, y se desarrolló con una gran intensidad y una acidez estructural maravillosa, para rematar en un final largo, profundo, intenso, persistente, muy elegante y tremendamente complejo. Entre grandes cotas de placer, brotaban sin querer recuerdos de maderas finas, de hojas secas, de fruta pasa, de especias, de metal, de tabaco, todo muy bien enlazado y con una trabazón perfecta. Difícil de desentrañar, y todavía con gran cuerpo y con tanino vivo y noble.

No sé si volveremos a probar otro, pero le queda todavía mucha vida por delante.



Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.
Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Château Musar Hochar Père et Fils 2012

Hacemos tierra hoy en el otro lado del Mediterráneo, en las costas libanesas, para adentrarnos en el valle de Bekaa, en los confines más remotos de la viticultura de la especie humana. Más de 6 milenios de tradición abalan la artesanía vinícola de esta región. Hablamos de un viñedo situado a más de 1000 msnm, con más de 300 días al año de sol y con duras nieves en invierno. Solo los beduinos tienen lo que hay que tener para recoger a mano las uvas en aquellas montañas de grava. Sobra decir que los vinos naturales, orgánicos, ecológicos, sin clarificar, sin filtrar, sin azufre añadido, sin levaduras de cultivo, sin nada de moderna tecnología postrada a los pies del consumismo... en fin, esos vinos, eran así en Château Musar mucho antes de que los europeos inventáramos el nombre para definirlos. 

Château Musar es una bodega noble, honrada y de clase mundial. Desde el s. XII, la familia Hochar, de origen francés, tiene raíces en el Líbano, aunque la bodega data de 1930. Gaston Hochar, su fundador, se hizo muy popular durante la II Guerra Mundial a través de la relación con los oficiales militares franceses afincados en el Líbano. Hoy, sus nietos Gaston y Marc Hochar mantienen la bodega con el mismo espíritu, que aúna tradición libanesa y bordelesa, para cultivar 180 Ha de viñedo con el mejor tino. La bodega elabora vino de tres estándares comerciales: un vino joven tinto sin madera, Jeune, un vino tinto de gama media, Hochar, y tres vinos de la gama superior, blanco, tinto y rosado, Château Musar. Podría parecer un trío muy vulgar, y desde España se tiende a pensar que ese rosado será una mera mezcla de no se sabe qué para contentar a un público que no sabe qué beber. Nada más lejos de la realidad: el rosado es un vino de gama alta, con el espíritu imitativo de los cuvée rosé de Champagne, pasados por barrica y con enorme potencial de guarda, un estilo muy apreciado por Serge Hochar, el hijo del fundador. Nosotros hoy nos conformamos con probar la gama media, el Hochar Père et Fils, que apunta enormes luces a un precio más que razonable. Lo difícil es encontrarlo. Prometemos más catas de esta lúcida bodega.





Château Musar Hochar Père et Fils 2012. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Gaston y Marc Hochar.
Procedencia: Líbano > Valle de Bekaa > Aana.
Coupage: cinsault 45%, garnacha 25%, cabernet sauvignon 10%, cariñena 10%.
Elaboración: fermentación con levaduras autóctonas en cemento; 9  meses de crianza en roble de Nevers.
Web: Château Musar
Precio: 20-25 EUR
Proveedor: El Sumiller.
Maridajes: aquí deberíamos maridarlo con comida libanesa o similar, pero, además de ese perogrullo, encaja perfectamente con platos muy especiados, guisos de carne grasa, especialmente cordero; también será apropiado con platos a base de carne en general, legumbres, pastas y arroces a base de carne, patés de caza (jabalí, corzo, ciervo, perdiz), etc.
Puntuación media (1): 4.00 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de color picota oscuro intenso de capa media alta, con el ribete medio abierto y una lágrima fina, abundante, perezosa y muy bonita. En nariz resulta muy sorprendente, al menos desde este lado del Mediterráneo, destacando notas de especias desconocidas, de fruta roja y negra muy dulce (quizá por el singular aporte de la garnacha de esta añada 2012), como almibarada, como de golosina casera o de jarabe de frutas. Es fresco y complejo, con vaivenes ligeros de ahumados y minerales de enorme profundidad. Te deja con una sensación de lejanía, como de perseguirlo y no alcanzarlo. En boca es fresco, dulce, muy frutal (roja y negra de zarza), licoroso, con matices de sotomonte y de guindas. Tiene un buen volumen y un tanino noble y preheminente, pero suave y cariñoso a la vez, y explota en un final persistente de buena intensidad, con cuerpo, estructura y acidez, pero con ligereza suficiente que invita a volver. Destella un recuerdo lejano de regaliz dulce que se aprecia también en la retronasal, dulce y refrescante a la vez, muy particular y muy atractivo. Está muy bien para tomarlo ya, pero guardará bien 5 o 10 años. Nótese que los vinos de gama alta de Château Musar tienen una guarda de varias décadas, tan firme como la de los mejores vinos de Burdeos.

Sin duda, nos enfrentamos a un vino excelente que sorprende en todas sus facetas, al menos al compararlo con los vinos que uno suele conocer de Europa y del nuevo mundo. Nos faltaba volver al viejo mundo, el viejo de verdad, el de antes de Homero, miles de años más antiguo que los mitios egipcios de Isis y Osiris. Rumor de vino nos llega desde allí, y tantas otras cosas más de las que deberíamos aprender.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.
Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Goianea UNO 2014 (reseña)

Goianea UNO 2014. 
Tipo: blanco seco.
Winemaker: Nombre.
Procedencia: España > Arabako Txakolina > Lezama y Artomaña.
Coupage: hondarribi zuri y hondarribi zerratia.
Elaboración: crianza de 6 meses con sus lías finas en inox.
Web: Goianea
Precio: 10-15 EUR
Proveedor: El Sumiller.
Maridajes: almejas, marisco cocido, moluscos a la plancha, pescado blanco, ensaladas verdes, aperitivos, pintxos variados.
Puntuación media (2): 3.00 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de color dorado pajizo pálido, de capa muy baja, muy brillante y con destellos de oro viejo, lágrima gruesa y densa. En nariz se muestra honesto y con personalidad, de media complejidad y poca intensidad, con predominio de la frescura, el mineral y la fruta, aunque también con algún recuerdo de caramelo blanco, todo ello muy sutil. Al paladar viene muy refrescante y ácido, herbáceo, vivo, circula con un volumen medio, pero con buen cuerpo, y remata en un final persistente casi licoroso, con recuerdos de la gama amílica en la retronasal. Tiene un fondo de verduras codidas o en conserva (alcachofas, espárragos).

Este txakolí es un vino fiel a la esencia del nombre, pero quizá con más empaque, más de interior, con la acidez mejor domada, que se deja degustar con placer y que merece habitar una copa de cristal austriaco. Su personalidad y su equilibrio marcan la diferencia en un género de vinos de no muy altas cimas. Eso sí, puede medirse con cualquiera de los de Guetaria sin ningún complejo. Para beber durante 2017 y 2018, tiene aguante.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.
Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Horizontal Prieto Pariente 2014

Tenemos el capricho hoy de catar los primeros vinos de una joven bodega que nació en el 2012 con vocación de elaborar vinos con personalidad,  en un viñedo olvidado y para un público exigente y moderno. Se trata de la bodega Prieto Pariente, que nace de la mano de Martina e Ignacio, tercera generación de Bodegas José Pariente. Sobra comentar el saber hacer que acumulan, pero cabe señalar el interés que se han tomado por recuperar el viñedo de los páramos de Valladolid para elaborar vino singular, de pequeña producción y alejado del gran público, de unas cepas difíciles que estaban llamadas a ser arrancadas. Su primera añada fue la de 2013. Hoy le damos un vistazo y ponemos en valor su segunda añada, la 2014, en tres de sus cuatro vinos: Viognier, Prieto Pariente y El Origen. Nos guardamos para otra ocasión Confines, un tinto de Garnacha de la Sierra de Gredos.



Prieto Pariente Viognier 2014. 
Tipo: blanco seco.
Winemaker: Martina e Ignacio Prieto Pariente.
Procedencia: España > Castilla y León > Valladolid > La Seca.
Coupage: viognier.
Elaboración: fermentación parcial en barrica de roble de 300L y crianza en ella de 6 meses.
Producción: 3600 botellas.
Web: Prieto Pariente
Precio: 16 EUR
Proveedor: Vila Viniteca.
Maridajes: versátil, pescados variados, arroces y legumbres no muy contundentes, platos de pasta a base de mar, marisco potente, carnes blancas.
Puntuación media (3): 4.00 / 5.
Fecha de cata: diciembre 2016.

Probamos la primera añada de este vino blanco de color dorado metálico brillante de buena intensidad, de capa baja y de lágrima gruesa y perezosa. Responde a aromas primarios frutales, con predominio de la fruta blanca de hueso (melocotón de viña), acompañados de sutiles matices florales y un recuerdo de especias dulce. Es lejano, elegante, profundo, sutil, fino, complejo. A la boca viene fresco, cítrico, con buen volumen, complejo, de paso amargoso, pero de trago amable y redondo, con un final de media longitud y persistencia, aunque de buena intensidad, que recuerda de nuevo al melocotón con detalles de almendra amarga. Es un vino que expresa sobre todo los matices varietales, con muy buena carga frutal y con una delicada integración de los matices de madera, de esos que satisfacen a cualquiera, de los que invitan a beber a cada sorbo, pero con los que se puede uno detener a pensar. Es difícil acertar todavía, pero apunta una guarda interesante, no menos de 4 años.

Prieto Pariente 2014. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Martina e Ignacio Prieto Pariente.
Procedencia: España > Castilla y León > Valladolid > Mucientes y Pedrosa del Rey.
Coupage: tempranillo 55%, garnacha 45%, de viñas de más de 60 años de edad.
Elaboración: fermentación alcohólica en inox; fermentación maloláctica parcialmente en barrica de roble; crianza de 11 meses en barrica de roble francés usada.
Producción: 7000 botellas.
Web: Prieto Pariente
Precio: 16 EUR
Proveedor: Vila Viniteca.
Maridajes: versátil, platos a base de carne no demasiado contundentes, también pescados azules, quesos de media y alta curación, legumbres, pastas y arroces.
Puntuación media (3): 4.00 / 5.
Fecha de cata: diciembre 2016.

Segunda añada de este vino tinto de color cereza granate, de capa media alta, con el ribete prieto y púrpura y una lágrima gruesa y abundante. En nariz se abre a frescura y ligereza, a fruta y flor muy perfumada, con matices mentolados, de eucalipto, de bálsamo... una gama amplia y compleja de aromas con recuerdos de maderas finas y especias. Muy elegante. En el paladar se deja sentir franco, también fresco y muy elegante, dulce, goloso, muy frutal, con un tanino noble exquisito y delicado. Tiene un paso amable, de los que invitan a beber, y desarrolla un volumen ligero y muy agradable. Al final remata largo, fino, con mucha clase, con recuerdos de pimienta rosa, con destellos amargos y terrosos de chocolate y café. Un vino estupendo y fino, de una acidez excelente que le augura un gran porvenir, no menos de 5 años.

Prieto Pariente El Origen 2014. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: Martina e Ignacio Prieto Pariente.
Procedencia: España > Castilla y León > Valladolid > Mucientes, Pedrosa del Rey y Valbuena de Duero.
Coupage: tempranillo 75%, garnacha 20%, cabernet sauvignon 5%, de viñas de entre 60 y 90 años de edad.
Elaboración: crianza de 17 meses en barricas de roble francés nuevo y usado.
Producción: 5000 botellas.
Web: Prieto Pariente
Precio: 32 EUR
Proveedor: Vila Viniteca.
Maridajes: como el anterior, es un vino versátil, incluso más versátil todavía, que acompañará bien platos a base de carne no demasiado contundentes, pescados azules, quesos de media y alta curación, legumbres, pastas y arroces.
Puntuación media (3): 4.50 / 5.
Fecha de cata: diciembre 2016.

Segunda añada de un tinto de aspecto similar al anterior. En nariz se comporta también de un modo parecido, pero más profundo, con más aromas propios de la crianza en madera, con una carga de fruta roja (cereza, mora) más profunda y compleja. Destaca en las mismas gamas que el Prieto Pariente, pero con mayor profundidad de matices. En boca es también fresco, pero de gran volumen, con un paso carnoso de tanino goloso y noble, fuerte, elegante, de un final longitudinal muy profundo y complejo, con puntas salinas y minerales muy sabrosas. Asombra una carga frutal exquisita y muy bien mezclada con la madera, con ese fondo mineral, floral y con un punto alcohólico refrescante. Es un vino polifacético, fino y con mucha clase, de los que son fáciles de disfrutar y difíciles de catar, de esos caldos inteligentes que aúnan viñedo y carácter, sin perder de vista la sencillez del producto. Tiene estructura para 10 o 20 años.

En conclusión, los vinos de Prieto Pariente nos parecen finos y elegantes, muy fáciles de beber, pero que pueden satisfacer al público más exigente con su colorido abanico de sensaciones. Evolucionarán bien en botella y merecen el precio que cuestan.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.
Entre paréntesis el número de puntuaciones.

Nobilo Icon en Blanco y Negro

Catamos hoy en blanco y negro los vinos de la bodega neozelandesa Nobilo en su gama más alta, esto es, su sauvignon blanc y su pinot noir de Malborough, de la serie titulada Icon. La bodega remonta sus orígenes a una familia de inmigrantes croatas del mismo nombre, que a su vez tienen una tradición vinícola de más de 300 años. Los Nobilo Icon son vinos monovarietales frescos y directos, con una perspectiva comercial y de gran público, pero también con otra que no quiere perder las raíces por completo. Podríamos decir que sus vinos sacrifican algo de personalidad a cambio de sencillez y versatilidad para todos los gustos; son efectivos, no disgustan a nadie, pero tampoco enamoran a muchos.

Nobilo Icon Sauvignon Blanc 2014. 
Tipo: blanco seco.
Winemaker: David Edmonds.
Procedencia: New Zealand > Marlborough > Awatere Valley y Rapaura.
Coupage: sauvignon blanc.
Elaboración: sin crianza.
Web: Nobilo
Precio: 19 EUR
Proveedor: Bodeboca.
Maridajes: moluscos, ensaladas verdes, vegetales, marisco cocido.
Puntuación media (2): 3.25 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de color dorado pálido cristalino y luminoso, de capa muy baja y lágrima abundante. En nariz es, sobre todo, un vino vegetal, herbáceo, con generoso aroma a césped recién cortado, a hinojo, a cilantro... Por debajo desprende aromas sutiles de fruta verde (manzana, pera), con lejanos recuerdos de mineral. Muy fresco, de media intensidad y poca complejidad. En boca es franco, muy fresco y cítrico, con puntas de vegetal muy verdes sobre un fondo frutal verde y blanco, con algún recuerdo lejano de especias dulces. Tiene un paso amable, de medio volumen, de media potencia y media complejidad, y un final de persistencia media. Tiene estructura y acidez para guardarse bien unos 5 años, pero nos parece un poco verde todavía; aunque quizá perdiera parte de su personalidad fresca con la edad.

Nobilo Icon Pinot Noir 2013. 
Tipo: tinto seco.
Winemaker: David Edmonds.
Procedencia: New Zealand > Marlborough > Waihopai Valley.
Coupage: pinot noir de viñas de 11 años de edad.
Elaboración: un año de crianza en barrica de roble francés 25% nueva.
Web: Nobilo
Precio: 24 EUR
Proveedor: Bodeboca.
Maridajes: versátil en platos no muy contundentes, como los preparados a base de carnes blancas, pescados azules, arroces y pastas no muy condimentados, embutidos ligeros.
Puntuación media (2): 3.50 / 5.
Fecha de cata: enero 2017.

Vino de color cereza con detalles luminosos de rubí, de capa baja, brillante y de buena lágrima. En nariz es fino, elegante, sutil, con buena presencia de la fruta roja sobre sutiles notas de pimienta rosa acompañadas por ligeros destellos de la crianza en madera (finas especias, vainilla, cacao...). Tiene una intensidad media, pero está bien equilibrado en sus gamas y ofrece una buena complejidad. En boca tiene un ataque fino, seco, maduro, de base frutal, acompañada por notas vegetales en la última parte del recorrido (espárragos, alcachofas, judías verdes). Tiene un volumen ligero, muy fácil de beber, delicado, con potencia media, pero con un buen abanico de caracteres: tiene clase y equilibrio. La personalidad del vino pide consumirlo ya, pero aguantará bien dos o tres años.

Criterio de puntuación:
5: Excepcional, complejo, único, emblemático.
4: Excelente, genuino, satisfactorio, ejemplar.
3: Bueno, recomendable, equilibrado, destacable.
2: Correcto, común.
1: Insuficiente, no recomendable.
Entre paréntesis el número de puntuaciones.